SEMINARIO CHAN FAMILY CHOY LEE FUT KUNG FU EN ZARAGOZA

Llevo casi toda mi vida adulta involucrado en las artes marciales, y desde hace 13 años en el Choy Lee Fut en particular. Y la experiencia del pasado fin de semana del 28 y 29 de Mayo ha sido una de las más fascinantes que he vivido en ese ámbito. Durante dos intensos días, Sifu Rafael Francisco Ruiz Rodriguez, Maestro Internacional Wing Sing Tong y Discipulo del Jeong Moon Chan Yong Fa estuvo enseñando en nuestra pequeña Escuela de Zaragoza una de las formas más largas del nivel primario: Dai Sup Ji Kau Da Kuen.  ¡La primera vez que la Wing Sing Tong protagoniza un evento en nuestra ciudad!

Pero es que, además, fuimos distinguidos con la inestimable presencia y ayuda durante todo el seminario de Sifu Geni Martinez Bronchud, también Maestro Internacional Wing Sing Tong y Discipulo de Jeong Moon Chan Yong Fa, quien forma parte junto con Sifu Rafael Francisco Ruiz Rodriguez del Consejo de Dirección de la Wing Sing Tong en España.

¿Por qué ha sido tan fascinante? Lejos de impartir uno de esos seminarios de los que sólo te llevas un cascarón vacío, una simple secuencia de movimientos, Sifu Rafael Ruiz desgranó literalmente la forma mostrándonos los principios o, como dice él, las dinámicas subyacentes en la misma. A ver, para ser honestos no es la primera vez que experimento esto; cada ocasión que he tenido el privilegio de estudiar con Sifu Rafael Ruiz durante el último año ha sido igual de gratificante. Recuerdo que nada más empezar el primer curso al que asistí con él , mi ojos se abrieron como platos y lo que pensé, más o menos, fue: ¡Dios mío, otro Choy Lee Fut es posible!.

Y es que con Sifu Rafael Ruiz todo cobra sentido de repente. Esos cascarones vacíos se llenan de contenido y de luz. Su comprensión y dominio del sistema son abrumadores.

Y así pasamos el fin de semana. Aprendiendo, disfrutando y, también hay que decirlo, pasándolas canutas en algunos momentos. Quien conozca la forma sabrá lo larga y prolija que es y puede imaginarse lo que significa metérsela entre pecho y espalda en un fin de semana. Hay que trabajar de firme. Y eso que la planificación y capacidad didáctica de Sifu Rafael Ruiz lo hacen llevadero. Pero el Sábado por la noche nos íbamos a cenar todos juntos con el paso renqueante de quien se ha pegado seis horitas dándole caña, y la perspectiva de otras tres más a la mañana siguiente. Ahora bien, también hay que decirlo, con la sonrisa interior (sí, sonrisa interior; no estábamos para mover más músculos) por haber recibido un maravilloso regalo. Agotados pero felices.

 

Pero por encima del plano técnico, marcial, lo que más me gustaría destacar es que el Domingo Sifu Rafael Ruiz se despedía de nosotros de esta manera: Bienvenidos a la Familia. Cuatro sencillas palabras con un profundo significado.

Veréis, a mi modo de ver mucho se esgrime la retórica de la hermandad en las artes marciales y su virtud como refugio y herramienta para inculcar valores de respeto, humildad, disciplina, constancia, colaboración,... pero pocas veces se hace realidad.

Sin embargo, todo ese fin de semana estuvo envuelto en un precioso velo de camaradería. Allí acudió gente majísima de Barcelona y Valencia con la que era la primera vez que coincidíamos y, sin embargo, se creó desde el primer momento una cálida conexión.
Ahora en Choy Lee Fut Zaragoza disfrutamos del alivio que se siente cuando uno ha encontrado por fin su sitio. Y, por ello, creo que este fin de semana ha estado jalonado para nosotros por algo más que un seminario; por esa bienvenida a la familia.

Voy a terminar esta reseña agradeciendo sincera y profundamente a mi grupo el empeño demostrado este fin de semana. Ellos sabían donde se metían al enfrentarse con una forma como Dai Sup Ji Kau Da Kuen y no vacilaron en embarcarse en la aventura y hacer el esfuerzo necesario para estar ahí. Ellos son el alma de Choy Lee Fut Zaragoza y estoy muy, muy orgulloso de ellos.

También quiero agradecer el mismo esfuerzo a quienes se desplazaron a Zaragoza desde otros puntos de la geografía española para participar en el evento y acompañarnos durante esos días.

Y, por supuesto, dar las gracias por todo a Sifu Rafael  Francisco Ruiz Rodriguez y Sifu Geni Martinez Bronchud, que se han convertido para nosotros en figuras entrañables, respetadas y admiradas.

¡Hasta pronto!